Hace un tiempo era impensable para un realizador de vídeos aficionado, incluso para las pequeñas productoras, tomar imágenes aéreas de una ciudad, a menos que se fletara un helicóptero, cuyo coste superaba la mayoría de las veces las posibilidades presupuestarias de la producción. Al igual que ha ocurrido con otros aspectos del vídeo y la fotografía, la grabación de vídeos desde el aire se ha socializado gracias a la tecnología. Este vídeo aéreo de Donostia está grabado con uno de los drones más populares que existen en el mercado, el DJI Phantom 2, y una de las cámaras más vendidas en el mercado, la Gopro Hero 3.
Los drones son aparatos no tripulados a los que se les acopla una cámara mediante diferentes soportes. Tradicionalmente, se han utilizado helicópteros teledirigidos, pero recientemente se han popularizado los de cuatro e incluso ocho hélices, llamados cuadracópteros y octocópteros. Son más estables que los de una sola hélice. También son bastante asequibles, en comparación con lo que puede suponer poner a volar un helicóptero tripulado, aunque ya se sabe que cuantos más accesorios más se encarece el asunto, como con todo lo que a tecnología se refiere.
Lo de las imágenes aéreas no es nuevo, es un recurso que se utiliza desde hace tiempo en documentales y otro tipo de producciones para la televisión. Fue especialmente celebrado un programa producido para Euskal Telebista llamado «Euskal Herria, la mirada mágica«. Se trata de una serie de documentales sobre el País Vasco grabados exclusivamente desde el aire y acompañados de la imponente y grave voz de un narrador. Una obra maestra que aún se puede adquirir en DVD. En Youtube se pueden encontrar fragmentos del capítulo dedicado a la ciudad de Donostia, aunque en muy baja calidad.
Una de las ventajas que ofrecen los drones frente a los helicópteros tripulados es la reducción de riesgo. Precisamente, el helicóptero que utilizaban para grabar el programa de ETB sufrió un accidente mortal en el que fallecieron 3 de sus tripulantes. Los drones también pueden resultar peligrosos, no para quienes los conducen, sino para las cabezas sobre las que vuelan. De hecho, la legislación española prohibe el vuelo de este tipo de aparatos no tripulados, aspecto que ha sido recordado recientemente por la Agencia Estatal de Seguridad Aérea (AESA). También se ha prohibido el uso de drones en el Parque Nacional de Yosemite, en Estados Unidos.
Hay una empresa en Donostia que lleva una tiempo tomando imágenes áereas con drones. Se llama Airean y no hace mucho publicó un vídeo grabado con motivo de una exhibición de las diferentes disciplinas de pelota que se llevó a cabo en Alderdi Eder, frente al edificio del Ayuntamiento de Donostia. Además de este vídeo aéreo de Donostia, esta empresa tiene unos cuantos más en su canal de Vimeo. Algunos de ellos espectaculares, como este formado por imágenes aéreas del del Castillo de Arteaga en Bizkaia.
En la agencia Barking Blogs llevamos tiempo queriendo hacernos con el Phantom 2, para poder utilizarlo con una cámara Gopro Hero 3. Es el cuadracóptero que ha utilizado Sergio Laburu para la realización del vídeo titulado Donostia Air Tour. Anteriormente hemos utilizado helicópteros para tomar imágenes aéreas, como en este vídeo realizado para Getariako Txakolina, o un documental sobre el Puerto de Pasaia. Con lo que nos gastamos en aquella ocasión en una jornada de grabación, hoy en día podríamos comprarnos un drone.
Aunque nos vendría bien para poder hacer planos aéreos sin necesidad de subcontratar a otra empresa, todavía no nos hemos decidido. Por varias razones. Por un lado está el tema de la legislación. Preveo que se va a endurecer en la medida que los drones se vayan popularizando y se conviertan en un problema. Bastará con que haya un accidente más o menos grave para que las autoridades se pongan serias con este asunto y hagan valer su ley. Por otro lado, aún tenemos que ver si amortizaremos la inversión que, dicho sea de paso, tampoco es excesiva. Los costes se han abaratado muchísimo y hoy e día los drones son casi un juguete al alcance de cualquiera.
Mientras nos lo pensamos, os dejamos otro vídeo de Donostia a vista de pájaro que realizamos hace unos años, sin necesidad de utilizar un drone. En aquella ocasión nos subimos a varios puntos altos que existen en la ciudad y realizamos un vídeo utilizando la técnica tilt-shift. Lo titulamos Mikropolis Donostia y corrió como la pólvora en redes sociales.