Bergen es la segunda ciudad más poblada de Noruega y la capital oficiosa de la región conocida como Noruega Occidental. Su historia está marcada por su pertenencia a la liga hanseática, una federación de comerciantes alemanes que estableció varias delegaciones comerciales y dejó un legado importante. Hoy en día es considerada la puerta de entrada a los fiordos noruegos. Esta es una video guía de viaje en la que se muestra, de forma aproximada, qué ver y hacer en Bergen.
Todo aquel que quiere viajar a los fiordos noruegos pasa casi inevitablemente por Bergen. Y digo inevitablemente por no decir obligatoriamente, pues esta ciudad noruega es o al menos debería ser de obligada visita para todo aquel que viaja a los fiordos de Noruega. La ciudad alberga el mayor puerto del país, que a su vez es uno de los más importantes de Europa en lo que a turismo de cruceros se refiere.
Generalmente se llega a Bergen bien en crucero o en avión, en este último caso a través del aeropuerto internacional de Flesland. Es, por cierto, el principal helipuerto de la industria petrolera, desde donde miles de personas se trasladan a sus puestos de trabajo en las plataformas petrolíferas. La ciudad está enclavada en un valle bordeado por lo que se conoce coloquialmente como «Las Siete Montañas», De Syv Fjell en noruego.
Las antiguas casas de la Liga Hanseática de Bergen, en el barrio conocido como Bryggen (literalmente «muelle»), son sin duda la mayor atracción turística. Las casas de madera que han sobrevivido a numerosos incendios fueron declaradas Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1979. Este grupo de edificios de madera, conocido como «kontor«, servía como puesto comercial de la Liga Hanseática en el extranjero. A pesar de que existían varios «kontor» en Europa, solo el de Bryggen ha sobrevivido al paso del tiempo, y de los incendios.
QUÉ VER Y HACER EN BERGEN
Bryggen puede ser un buen punto de partida para iniciar la visita a Bergen. En nuestro caso, además, el hotel Comfort Hotel Holberg donde nos alojábamos estaba situado muy cerca del puerto. Así que, nada más llegar, aprovechamos el poco tiempo que nos quedaba antes de cenar para perdernos por las callejuelas de Bryggen, echar la mirada hacia atrás e imaginarnos cómo vivían en el siglo XVII los comerciantes de la Liga Hanseática de Bergen.
En uno de los extremos de Bryggen se encuentra el Museo Hanseático, que permite al visitante conocer por dentro una de las coloridas casas de madera, excelentemente conservada desde que en 1754 la liga cerrara este «kontor». El museo reproduce el modo de vida de los comerciantes que lo poblaron varios siglos atrás. Detrás de Bryggen se encuentra la iglesia de Santa María o Mariakirken, un templo románico del siglo XII no menos espectacular que las casas de colores.
Siguiendo por la calle Bryggen asoma la fortaleza Bergenhus Festing, uno de los más antiguos y mejor preservados castillos de Noruega. Tras pasear por el interior de la fortaleza, recomiendo buscar la salida Norte para descubrir el vecindario de Skuteviken, cuyo origen se remonta al siglo XVII. Se trata de un lugar muy tranquilo, formado por tradicionales casas blancas de madera y estrechas callejuelas empedradas por las que merece la pena pasear.
La segunda atracción más importante de la ciudad, por detrás de Bryggen, se encuentra en el monte Fløyen, la montaña más visitada de de las 7 que rodean la ciudad. Se puede acceder andando o en el funicular Fløibanen, y desde su mirador se aprecia una hermosa vista panorámica de la ciudad
Fløyen es parte de Bergens Fjellstrekninger, un inmenso parque junto a la ciudad que ofrece posibilidades para todos los gustos. Desde allí se pueden emprender rutas de senderismo y paseos prácticamente para todas las condiciones y edades. Fløyen es, además, la meta de la marcha montañera 7 Fjellsturen que se celebra anualmente el último fin de semana de mayo y recorre las famosas siete cumbres de Bergen.
DÓNDE COMER EN BERGEN
Antes de proseguir el camino para descubrir otros rincones de Bergen es conveniente apaciguar la sed y reponer fuerzas. En lo que a la primera recomendación se refiere, yo opté por una de las cervezas locales que se produce en la principal fábrica cervecera Bergen. En concreto pude tomar una verveza Hansa Pale Ale que me supo a gloria.
Cumplida la primera de las recomendaciones, llega la hora de completar la segunda, que es inherente a la primera porque ya se sabe que no se debe beber sin comer. A la hora de comer en Bergen, se puede optar por hacerlo en las propias casitas de madera de Bryggen, en las que hay varios restaurantes de comida tradicional. Reconoceréis el restaurante Enhjørningen por la imagen de un unicornio ciertamente bien dotado que hay sobre el dintel de la entrada principal. A pocos metros está el Bryggen Tracteursted, también de estilo tradicional.
El pescado es el plato rey así que no es conveniente salir por la puerta sin haber probado bacalao (si os gusta más jugoso pedidlo poco hecho porque son dados a cocinarlo bastante) o salmón, tanto fresco como ahumado. Durante nuestra visita también probamos una cocina algo más elaborada en el restaurante Colonialen, que cuenta con un espacio llamado Litteraturhuste o Casa de la Literatura. Y es que demás de nutrirse con alimentos de la tierra, uno puede saciar su sed de literatura en la pequeña biblioteca que hay junto al comedor.
En Bergen, como no podía ser de otra manera, se prepara el salmón ahumado con finas hierbas o sin ellas, entre las que creo haber identificado el eneldo, entre otras. Se puede encontrar y comprar en abundancia en Fisketorget, que presume de funcionar desde el año 1276. Es el mercado de pescado de Bergen, que ocupa parte del muelle tanto en recinto cerrado como en el exterior. Además de comprar para llevar, en los puestos de pescado de Bergen se puede degustar in situ el pescado y el marisco, que preparan a la vista del consumidor y se come en unas mesitas que hay allí mismo.
Si el presupuesto no da para mucho, pero aún así no se quiere renunciar a probar la gastronomía local, en la panadería ecológica Godt Brød, no contentos con vender un delicioso pan, preparan unos bocadillos y sandwiches al gusto de cada cual. Y si el presupuesto es todavía más bajo, tanto Fløyen como el césped de la fortaleza de Bergenhus son buenos lugares para hacer picnic siempre que el tiempo acompañe. ;)
BARRIOS DE BERGEN
Bergen está dividido en 8 distritos, cuya extensión va mucho más allá de la zona que normalmente se suele visitar. La mayoría de las atracciones turísticas se concentran en el distrito Bergenhus, que puede considerarse el centro neurálgico de la ciudad. En Bergenhus, a su vez, hay 21 barrios, los cuales merece patear sin descanso, porque como suele ocurrir en la inmensa mayoría de las ciudades, tras cada esquina te puedes encontrar una sorpresa.
Entre los barrios de Sydnes y Nygård está ubicada la Universidad, así como el Museo Universitario. Junto a este, la Iglesia de Johanneskirken, que pese a no tener mucho más de 100 años es digna de una visita. En Sydnes, al igual que en Nøstet, hay además una pintoresca zona residencial tradicional, con casas de madera y calles empedradas. Según tengo entendido, cada vez son más escasas porque son sacrificadas para construir nuevos edificios. Una pena.
Vågsbunnen y Strandsiden son probablemente las zonas más comerciales de la ciudad, mientras que en el barrio de Nordnes, en el extremo más septentrional de la península, se encuentra el parque Nordnesparken, justo al lado del acuario de Bergen, Akvariet i Bergen.
MUSEOS EN BERGEN
Hay varios museos en Bergen que merece la pena visitar. Además del ya mencionado Museo Hanseático, me hubiera encantado visitar el Museo Noruego de la Pesca o Norges Fiskerimuseum que se encuentra más allá de Skuteviken. Sin embargo, este museo abrió al día siguiente de nuestra marcha hacia los fiordos noruegos, así que no pude verlo a pesar de intentarlo.
Existen unos cuantos museos más en la ciudad, como el Museo de la Ciudad de Bergen y el Museo de la Universidad de Bergen, pero el que no podéis dejar de visitar si os apasiona el arte es el Kode Kunstmuseene i Bergen, el Museo de Bellas Artes.
En sus diferentes pabellones y secciones se puede disfrutar de numerosas obras de arte, aunque el Kode 3 destaca porque en él se encuentra la muestra dedicada a Edvard Munch. Atención: Aunque os empeñéis, allí no escucharéis el famoso «Grito», y mucho menos lo veréis, pues está en el museo dedicado al pintor noruego en Oslo. Esperemos que a buen recaudo…
[toggle title=»Información práctica»]
Horarios del funicular a Floyen.
Vuelos a Bergen desde Barcelona.
Mucho cuidado con los horarios en los museos. Algunos cierran a las 16:00 y todos ellos echan la persiana a eso de las 17:00, así que no es conveniente dejarlo par el final de la visita.
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Este viaje fue posible gracias al apoyo de Visit Norway, Vist Bergen , Fjord Norway y Vueling.
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