La Palma es conocida por la diversidad de sus paisajes. En muy poca distancia puedes pasar desde el nivel del mar a 2.400 metros de altura, de las dunas de picón volcánico a los verdes dragos de Garafía, de una cascada de colores a otra envuelta por un bosque de laurisilva… Si hay algo que me gusta de la Isla Bonita son sus contrastes. La que sigue es una pequeña guía para saber qué ver en la Palma, a través de 15 rincones que permiten disfrutar de sus paisajes.
1: LLANO DEL JABLE
La luz del atardecer arroja colores rojizos sobre el Llano del Jable y sus pinos.
Uno de los paisajes que más me impactó durante nuestro viaje por La Palma es el del Llano del Jable, que representa de alguna forma la lucha por el espacio que enfrenta al Pinar del Pilar y a las dunas de picón, una especie de gravilla volcánica que inunda el entorno. Este rincón de La Palma se encuentra a unos 1.200 metros de altitud, en la parte más elevada de El Paso. El mirador del Llano del Jable ofrece una espléndida panorámica desde la que se contempla el Valle de Aridane, con el extinto volcán Tacande (Montaña Quemada) en primer término. Un poco más lejos se puede ver la cresta de la vertiente sur de la Caldera de Taburiente, en la que destaca por afilado el Roque de los Cuervos. Este rincón de La Palma es además un mirador astronómico, con paneles que facilitan la observación de las estrellas.
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La Caldera de Taburiente, al fondo, en el que destaca el Roque de los Cuervos, una afilada aguja que hay en la cresta.
2: PLAYA DE NOGALES
Los acantilados de la Playa de Nogales.
Las playas de La Palma son rincones muy especiales. Muchas de ellas están formadas por arena volcánica negra a la que no estamos acostumbrados los que hemos crecido chapoteando en la playa de Ondarreta. La Playa de Nogales se encuentra en la orilla Nordeste de la isla. Se puede acceder desde las proximidades de la localidad de El Granel. Si se llega desde el Sur se puede llegar a través de la calle Juan Carro, mientras que si se hace desde el norte se llega más rápido por la calle Lirios. Ambas carreteras terminas en un aparcamiento desde el que hay que continuar a pie para pisar la curiosa arena negra. La Playa de Nogales se oculta tras unos acantilados de vértigo, a los que uno se puede asomar a través de un mirador que hay en la carretera de acceso. Es sin duda uno de esos lugares que hay que ver en La Palma casi de forma obligatoria.
Atardecer en la Playa de Nogales.
3: CASCADA DE COLORES
El agua surge más o menos caudalosa en la Cascada de Colroes dependiendo de la temporada.
Una de esas pequeñas joyas creadas como consecuencia de la colaboración entre el ser humano y la naturaleza. La Cascada de Colores es un salto reforzado por una pequeña presa artificial desde el que cae un hilo de agua ferruginosa que deja a su paso una estela de colores. La alta concentración de hierro tiñe de amarillos y ocres el recorrido sobre el que discurre, dibujando un camino por el que es imposible perderse. La Cascada de cColores se encuentra a medio camino entre el aparcamiento del Barranco de las Angustias y el Centro de Interpretación e Información en de la Caldera de Taburiente. Es uno de los atractivos más importantes de las diversas rutas de senderismo que se pueden realizar en la caldera, un rincón imprescindible de La Palma. Hay dos formas principales para llegar a la Cascada de Colores. La más sencilla es probablemente iniciando la caminata desde el aparcamiento del Barranco de las Angustias. Tras pasar por Dos Aguas, donde confluyen y son canalizadas las aguas de la caldera para su uso en regadíos, un desvío indica la dirección en la que se encuentra el Barranco del Almendro Amargo. Muy cerca de Roque Idafe se encuentra la famosa Cascada de Colores, dibujando un paisaje que parece salido de un cuento. Desde el aparcamiento son alrededor de 7 kilómetros de ida y otros tantos de vuelta.
Bifurcación en el barranco del Almendro Amargo. El río amarillo indica el camino a la Cascada de Colores.
4: PLAYA DE TABURIENTE
La Caldera de Taburiente vista desde su corazón, la Playa de Taburiente.
Desde la Playa de Taburiente se puede observar gran parte de la montañosa cresta que lo rodea. Es el mismísimo corazón de una caldera volcánica, una depresión que se encuentra entre 600 y 800 metros y se formó hace 2 millones de años. En su origen, se trataba de un cráter de grandes dimensiones con una sorpresa Kinder en su interior:Un inmenso mar de lava. Al enfriarse se formaron rocas basálticas con mayor peso que la lava superficial, lo que propició el descenso del nivel interior del cráter. El propio Barranco de las Angustias no se formó por la erosión constante de ríos de magma que, ayudados posteriormente por el agua, abrieron la salida al mar de la caldera. Existen muchas rutas para practicar senderismo en la Caldera de Taburiente. El acceso más conocido es el mismo que lleva a la Cascada de Colores, en sentido ascendente. Existe otra opción más cómoda, una ruta de unos 18 kilómetros que se realiza prácticamente cuesta abajo. Desde el aparcamiento del Barranco de las Angustias se puede contratar un taxi que te lleva al Mirador de los Brecitos, desde donde se inicia la ruta que permite disfrutar de los cambiantes paisajes de La Palma. El taxi cuesta unos 50 € así que recomiendo contratarlo solo si se va en grupo, para que salga a cuenta, o si a uno le sobran las perras.
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La caldera de taburiente cuenta con unas formaciones rocosas basálticas espectaculares.
5: ROQUE DE LOS MUCHACHOS
En lo más alto de la isla de La Palma se encuentra uno de los más importantes observatorios astronómicos del mundo.
Es sin duda uno de los rincones más emblemáticos de La Palma, pues se sitúa en el punto más alto de la isla, a 2.430 metros sobre el nivel del mar, presidiendo la cresta que rodea la Caldera de Taburiente. En la cima, a la que se puede acceder por una serpenteante carretera, se puede pasear por la cresta a través de un sendero muy cómodo habilitado para ello. Entre otras cosas, el roque es conocido porque en él está ubicado uno de los observatorios más importantes de Europa. De hecho, el Gran Telescopio de Canarias, el famoso GRANTECAN, es el mayor telescopio óptico del mundo. En días despejados, desde su cima se pueden divisar otras islas del archipiélago canario, como Tenerife, La Gomera y El Hierro.
La isla de Tenerife se distingue por la silueta del sagrado Teide.
6: VOLCANES DE TENEGUÍA
Los pinos sobreviven valientes en el interior del cráter del volcán de San Antonio.
La localidad de Fuencaliente es la que ha registrado el mayor número de erupciones volcánicas a lo largo de la historia de La Palma. Aún son recordadas las erupciones del Volcán de Martín (en 1646), San Antonio (1677), El Charco (1712) y la más reciente de todas, la erupción del volcán de Teneguía, ocurrida el 26 de octubre de 1971. Hoy en día, el Centro de Visitantes del Volcán de San Antonio ofrece la posibilidad de realizar una visita alrededor del enorme cráter. La entrada cuesta 5 € al público general y 3 para los residentes canarios. Desde el punto más alto del cráter de San Antonio se divisa el Volcán de Teneguía, cuyo nombre proviene de un roque sagrado para los aborígenes que se encuentra en las inmediaciones. Los roques quedaron prácticamente sepultados tras las erupciones del siglo XVIII. Hoy en día apenas asoman algunos peñascos rodeados de oscura lava, en los que aún se conservan petroglifos awaras, los habitantes originales de la Isla de La Palma conocidos como Benahoaritas o Auaritas. En lengua guanche (derivada del bereber) la Isla de La Palma se llama Benahoare. A lo largo de la historia se han documentado 16 erupciones en esta zona, de las cuales ninguna produjo víctimas mortales. La erupción de 1971 se alargó durante algo menos de un mes. El conjunto de volcanes de Teneguía está declarado monumento natural.
Los contrastes, siempre presentes en los paisajes de La Palma.
7: DRAGOS DE GARAFÍA
Un drago de Garafía, uno de los elementos singulares del paisaje de La Palma.
El municipio de Garafía, en el Noroeste de la isla, es conocido por sus queserías de cabra palmera, por el pastor garafiano (una raza de perro autóctona) y también por la abundancia de sus dragos. El drago es una especie de planta típica del clima subtropical y está muy presente en la Macaronesia, especialmente en las Islas Canarias. Existen varios dragos singulares en las islas, algunos de ellos con más de 500 años de vida en sus cortezas. En La Palma, además de los dragos gemelos de Breña Alta, son famosos los dragos de Buracas, un poblado perteneciente al barrio de Las Tricias. En esta zona se encuentra la mayor concentración de dragos de todo el archipiélago canario. Existe una ruta que se puede realizar a pie y que permite conocer estos peculiares árboles, así como acercarse al poblado de Caboco de Buracas, un asentamiento aborigen habitado en sus origenes por awaras. Actualmente, en estas cuevas conviven algunas comunidades que buscan una vida natural y ecológica lejos del ajetreo de las ciudades. Alguna de las cuevas que conforman el poblado ofrece alojamiento rural.
El poblado de Buracas es conocido por sus dragos y por el poblado formado por cuevas auaritas.
8: PLAYA DE ECHENTIVE
Atardecer en la Playa de Echentive en pleno abril.
La playa de Echentive esconde un tesoro en forma de pozas de agua cristalina de intenso color verde. Son lagunas litorales, se encuentran muy cerca de la costa y algunas de ellas, como la de El Remo, tienen filtraciones de agua dulce. Este pequeño rincón secreto esta ubicado muy cerca de Fuencaliente. Precisamente, se cree que antes de la erupción del Volcán de San Antonio en 1677 existía en estas playas una fuente de aguas termales a la que se atribuían propiedades medicinales. La Fuente Santa, que es como se llamó tras la cristianización de la isla, fue reconocida tanto por los pobladores originales de la isla como por los colonizadores. La erupción debió sepultar, quién sabe si para siempre o no, las aguas termales de Fuencaliente, que son precisamente la que dan nombre a la localidad. Se accede a las pozas de Echentive desde la playa del mismo nombre, a través del sendero delimitado sobre los cantos rodados de piedra volcánica. Para llegar a las pozas, basta con dirigirse hacia el mar tomando todos los desvíos que uno se encuentra a la derecha, hasta llegar a ese pequeño oasis volcánico llamado Pozas de Echentive, un rincón muy especial que hay que visitar en La Palma.
Las Pozas de Echentive invitan a darse un chapuzón. No dudéis en hacerlo.
9: SALINAS DE FUENCALIENTE
El paisaje remodelado por el ser humano se funde con el mar en este rincón de La Palma.
Se trata en este caso de un paisaje modelado a partes iguales por la naturaleza y el ser humano, aunque en este rincón de La Palma pesa más la mano de las personas que la fuerza de la naturaleza. Las Salinas de Fuencaliente son el resultado del empeño de una familia que en 1967 decidió crear una estructura salinera para abastecer de sal a la isla de La Palma. A pesar de la oposición del resto de salinas cercanas, y con la ayuda de un maestro salinero, importaron el modelo de salina de Lanzarote y establecieron una producción tradicional de sal. Las salinas se encuentran al lado del Faro de Fuencaliente. Desde 2014, el joven cocinero Juan Carlos Rodríguez dirige el restaurante adyacente llamado Jardín de la Sal, un espacio temático donde además de degustar una cocina creativa con un fuerte arraigo local se pueden hacer catas de sal y conocer de cerca su sistema de producción.
El Faro de Fuencaliente (en realidad los faros antiguo y nuevo) convive en este rincón con las salinas.
10: CASCADA DE LOS TILOS
La Cascada de los Tilos, parte del bosque de laurisilva.
Ubicado en el municipio de San Andrés y Sauces, Los Tilos alberga uno de los bosques de laurisilva más importantes de Canarias, un ecosistema heredado de la época terciaria con características singulares. Existe un centro de interpretación en este rincón de La Palma con una exposición permanente en la que se explica la importancia del patrimonio natural de este bosque de laurisilva. Unos pocos minutos a pie desde el centro se encuentra la primera maravilla del Barranco del Agua. Es la Cascada de los Tilos, que luce de nuevo en todo su esplendor después de haber estado desaparecida desde finales de los años 50 por la construcción de la central hidroeléctrica del Salto del Mulato. Desde el centro de interpretación parten varias rutas de senderismo homologadas, y se pueden contratar unos taxis que te llevan hasta el inicio de la ruta que llega hasta el Naciente de Marcos y Cordero (PR LP 6). Se trata de una estructura de 13 túneles excavados en la roca para canalizar el agua y es posible recorrerlo a pie. En1983, la UNESCO declaró 511 hectáreas de la finca El Canal y Los Tilos Reserva de la Biosfera para salvaguardar el ecosistema de la laurisilva macaronésica.
Un sendero permite acceder a la Cascada de Los Tilos.
11: AMANECER EN LOS CANCAJOS
Una pareja de turistas se baña al amanecer en la playa de Los Cancajos.
Los Cancajos, en Breña baja, es probablemente la zona donde se concentra la mayor infraestructura turística de la Isla Bonita, con numerosos hoteles y apartamentos. A primera vista, y según corroboran los gestores turísticos locales, La Palma no ha sufrido un desarrollo inmobiliario tan agresivo como el que se ha dado en otras orillas. Ni siquiera en los Cancajos. Durante nuestra estancia estuvimos alojados en el hotel H10 Taburiente Playa, desde el que partíamos todas las mañanas para recorrer los rincones de La Palma. La costa en la que se asienta el hotel está orientada hacia el Este, lo que nos permitió disfrutar de bellos amaneceres palmeros justo frente a nosotros. Una de esas mañanas, una pareja de turistas decidió darse un baño al poco de que el Sol asomara en el horizonte. Una buena manera de empezar el día disfrutando de los paisajes de La Palma.
Amanecer en Los Cancajos.
12: CHARCO AZUL
El Charco Azul en un atardecer de abril. La cosa ambia bastante en época estival.
Entre el núcleo urbano de la localidad de San Andrés y Puerto Espíndola hay un paseo marítimo que pasa sobre un rincón muy especial de la Palma, un lugar privilegiado frecuentado por bañistas locales y foráneos. Son las Piscinas Naturales del Charco Azul. El conjunto de piscinas de agua marina está formado por una piscina infantil, la piscina de El Charco (que incluye una cascada) y otra conocida como el Charco de las Damas. Tras su reapertura en 2012, las piscinas del Charco Azul fueron declaradas como una de las 10 mejores piscinas naturales de España. A menudo, los bañistas comparten espacio con pescadores que echan la caña para probar suerte, a ver si cae alguna»vieja» , uno de los pescados típicos de la gastronomía de La Palma.
Las plantaciones de platanos abundan en la costa noroeste de La Palma.
13: LOS BALCONES DE SANTA CRUZ
Los bancos de la Avenida Marítima de Santa Cruz de La Palma permiten invertir los roles. El mirador acaba siendo observado.
El balcón canario es un símbolo de la arquitectura de las islas. Paradójicamente, estos balcones cumplen actualmente dos funciones diametralmente contrapuestas. Por un lado, sirven como miradores para observar el mar pero, a su vez, se han convertido en parte del paisaje urbano y objeto de las miradas de los turistas. En Santa Cruz de La Palma los balcones se encuentran en la Avenida Marítima, en la parte trasera de las principales vías de este enclave colonial (calles O’Daly y Pérez Brito). Constituyen el más importante conjunto de saledizos conservado en Canarias sobre todo por los distintos tipos de balcones que se concentran en un espacio tan reducido espacio. Destacan también los llamados balcones dobles, de influencia portuguesa. Pese a que hoy en día constituyen uno de los atractivos de Santa Cruz, originalmente fueron ideados para ventilar las viviendas por su parte trasera, que daba a la marina. En muchos de los balcones existe aún un tablero en el que se colocaba el retrete, cuyas aguas fecales caían a la calle para desembocar en el mar. Por su orientación, los balcones gozaban de la caricia húmeda y fresca de los vientos alisios inferiores, lo que imagino que ayudaría a despejar el hedor que pudieran producir los restos… ;) Hoy en día existe una avenida marítima y se está construyendo una playa artificial con la que, según dice la prensa, Santa Cruz de La Palma lleva soñando largo tiempo.
Los típicos balcones canarios son parte importante del paisaje urbano de Santa Cruz de La Palma.
14: MIRADOR DEL TIME
Vistas desde el Mirador del Time.
Un gran corte llamado Barranco de las Angustias atraviesa el Valle de Aridane en el extremo oeste de la isla. Es la salida al mar de la Caldera de Taburiente. Un poco antes de llegar al valle desde el Norte y descender hacia el barranco para atravesarlo, hay un mirador que domina el valle. Es el Mirador del Time, uno de los rincones de La Palma desde el que las plantaciones de plátano parecen llegar hasta donde la vista alcanza. Esta atalaya está situada a 700 metros de altura en la carretera LP-1, entre las poblaciones de Los Llanos de Aridane y Puntagorda. El Barranco de las Angustias se funde con el mar en el pueblo de Tazacorte, desde el que en días muy despejados se intuye la isla de El Hierro. Existe un sendero que comienza en el antiguo puerto, un camino real de tres kilómetros que lleva hasta lo alto del mirador.
Espectacular visión de Los Llanos de Aridane y su avenida principal, desde el Mirador del Time.
15: EL CIELO DE LA PALMA
Fotografía nocturna del cielo de La Palma en Fuencaliente.
La Palma es la primera Reserva Starlight del Mundo, un título otorgado por la UNESCO que acredita el compromiso en la defensa de la calidad del cielo nocturno. El cielo de La Palma es sin duda uno de los paisajes más espectaculares y característicos de los que se puede disfrutar en la Isla Bonita. Hay zonas de exclusión donde se conservan intactas las condiciones de iluminación natural y la nitidez del cielo nocturno, lo que posibilita una mejor observación de las estrellas. Un plan de acción participativo promueve la preservación y los valores asociados a la calidad del cielo: Actividades de observación, eventos astronómicos, alojamientos temáticos, miradores astronómicos…La Palma es el paraíso del astroturismo. Nosotros pudimos disfrutar de una velada de observación de estrellas y fotografía nocturna al lado del Faro de Fuencaliente, de la mano de Toño González, de la empresa Cielos la Palma.
Atardecer en el faro de Fuencaliente, un rincón propicio para la observación de las estrellas en La Palma.
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Ver mapa grande
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Este viaje se realizó en el marco de la grabación de un vídeo sobre La Palma dentro de la campaña #Escuchalapalma.
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