La Pobla de Lillet, en la provincia de Barcelona, se jacta de ser la segunda localidad del mundo con más obras del arquitecto Antoni Gaudí, máximo representante del modernismo de Catalunya. En realidad alberga solamente dos obras de Gaudí, suficientes para hacerla merecedora de este título, solo superada por la capital. Se trata de los Jardins Artigas y el Chalet de Catllaràs, probablemente dos de las obras más desconocidas de Gaudí, y ambas se encuentran escondidas en la Comarca del Berguedà, en el Pirineo de Barcelona.
Lo primero que se encuentra el visitante es este magnífico mirador.
Uno de los puentes que desafía el curso del río Llobregat, que nace un poco más arriba.
De las 11 comarcas que pertenecen a la provincia de Barcelona, solo la del Berguedà se encuentra en el área pirenáica. De hecho, algunas de sus poblaciones pertenecen a Lleida. Una de sus montañas más emblemáticas es el Pedraforca, que se levanta imponente al noroeste. Pero no es el único atractivo que esconde esta comarca minera. El curso del río Llobregat es desafiado a su paso por la fábrica Artigas por varios puentes de fantasía. Nace solo unos kilómetros más arriba, en la preciosa localidad de Castellar de n’Hug. Una torre, una especie de garita medieval, vigila la llegada de visitantes desde un risco sobre el cauce del río. Son los Jardins Artigas, una de las obras más desconocidas de Gaudí.
Escaleras, puentes, pasarelas y pasadizos se suceden en un recorrido de fantasía.
El Buey de San Lucas de los Jardins Artigas.
El diseño de estos jardines guarda una curiosa historia. Gaudí viajó en 1905 a La Pobla de Lillet para construir el chalet de Catllaràs, una suerte de refugio de montaña destinado a alojar a los ingenieros de las minas de carbón que abastecían la primera fábrica de cemento Portland de Catalunya: Asland. La fábrica de cemento, en la vecina localidad de Castellar de Nuch, era propiedad de Eusebi Güell, rico industrial y principal mecenas de Gaudí, a quien debe su nombre el famoso parque de Barcelona, un auténtico icono. Durante su estancia en La Pobla de Lillet, Antoni Gaudí se alojó en casa del industrial textil Joan Artigas i Alart. Fue en agradecimiento a su hospitalidad que el artista le regaló a Artigas un boceto en el que diseñó una nueva ordenación de los jardines que el industrial tenía en la llamada Fuente de la Magnesia, un estrecho desfiladero que se encuentra al lado de la fábrica Artigas (actualmente en pie).
Los Jardins Artigas guardan similitudes con el parque Güell, pues fueron diseñados en la misma época.
Una de las esculturas que adornan el paseo.
Por aquel entonces Gaudí estaba trabajando en el Parque Güell en el barrio de Gracia de Barcelona y unos meses más tarde de su estancia en el Berguedà envió a unos albañiles a ayudar a los trabajadores locales a terminar los jardines. Por esta razón, los Jardins Artigas y el parque Güell guardan abundantes semejanzas de estructura y estilo. El jardín está totalmente integrado en el entorno y está diseñado para el reposo y la contemplación de la naturaleza. Repleto de recovecos, pasarelas, escaleras, puentes y pasadizos, en su decoración se observan elementos inspirados en la naturaleza, signo inequívoco de la arquitectura modernista. Abundan los símbolos cristianos como los animales alegóricos de los cuatro evangelistas: el Águila de San Juan, el León de San Marcos, el Buey de San Lucas y el Ángel de San Mateo (actualmente desaparecido). Las cuatro imágenes estaban situadas de tal forma que forman una cruz. El recorrido dibuja un paseo al borde del desfiladero entre glorietas, una cueva y varias fuentes de cemento en los que uno bien se quedaría unos días a descansar en la tranquilidad que producen las aguas en su camino por el cauce del río Llobregat.
Una torre, una especie de garita medieval, protege el merendero.
La decoración simula elementos de la naturaleza, como es habitual el el modernismo.
Los jardines, de propiedad particular, estuvieron abandonados durante largo tiempo, entre 1939 y 1989 y condenados al olvido. La falta de documentación que confirmara la autoría de Antoni Gaudí impidió que fuera tenido en consideración dentro de la obra del arquitecto modernista catalán. El Chalet de Catllaràs, que es en esencia el inicio de esta historia con final feliz, fue remodelado en los años 80 con un criterio que a juicio de algunos es discutible, y al parecer perdió prácticamente todos sus rasgos decorativos. Todo esto abocó al conjunto de obras a la oscuridad más absoluta. En 1971 un artículo arrojó luz sobre la autoría de Gaudí, y en 1992 se llevó a cabo la restauración de los Jardins Artigas bajo la supervisión de la Real Càtedra Gaudí, que finalmente ha dado por buena la hipótesis. Todo ello ha contribuido a que se convierta en uno de los puntos de interés turístico más importantes de la comarca de Berguedà, una de las obras más desconocidas de Gaudí que ya luce en todo su esplendor.
La fábrica Artigas, junto a las que se encuentran los Jardins Artigas.
Un sitio ideal para hacer el hamaiketako.
Los Jardins de Can Artigas son actualmente de propiedad municipal y se pueden visitar. Desde que su gestión pasó a manos públicas, tanto el acceso como las propias instalaciones han mejorado visiblemente. Los jardines forman parte de un conjunto de recursos turísticos entre los que cabe destacar el Museo del Cemento Asland así como el Museo de la Minería de Cercs y el yacimiento de Fumaya, entre otros. Además, se puede realizar un recorrido en el Tren del Cemento, que sale de La Pobla de Lillet y termina en el citado museo de Clot del Moro, haciendo parada en el apeadero de los Jardins Artigas. Se recomienda hacer la visita siguiendo el recorrido tradicional, que permite hacer descubrir esta obra desconocida de Gaudí en el orden cronológico en el que se construyó.
El Águila de San Juan pasa revista a todo el que entra.
El río Llobregat se puede cruzar a través de los numerosos puentes.
Hablar de lugares desconocidos es como hablar del «descubrimiento de América». Es relativo. Varias han sido las obras de Gaudí señaladas como las más desconocidas, como la Torre Bellesguard o la Fuente de Hércules Palau de Pedralbes, Pero no creáis que el título de este reportaje es gratuito. De entre las que hemos analizado, es junto con la Nave Gaudí de Mataró (que además es uno de su primeros trabajos) la que menos presencia ha tenido en los medios, y la que menos volumen de búsquedas ha generado según Google Trends. Y eso, junto con un pasado sumido en el olvido, la convierte presumiblemente en la obra más desconocida de Gaudí.
[toggle title=»Ruta del Tren del Cemento, track GPS»]
[/toggle]
[toggle title=»Enlaces de información turística»]
Tren del Cemento
Oficina de Turismo de Berguedà
Barcelona es Molt Mes
Ayuntamiento de La Pobla de Lillet
[/toggle]
[toggle title=»Horarios y precios «]
TARIFAS:
- Entrada general: 4,15 €
- Entrada reducida: 3,70 € (Jubilados, Carnet Joven, Estudiantes, Alojamiento Comarcal)
- Entrada reducida: 3,50 € (Alojamiento y restauración Local, Carnet Cultura Berguedà)
- Entrada infantil de 6 a 13 años: 2,10 €
- Entrada infantil de 0 a 5 años: gratis
- Socios Club Super3: entrada gratuita
- Profesores, con el carnet de docente: entrada gratuita
- Grupos y escolares: Consultar en la web.
HORARIOS:
- Del 1 de enero al 13 de marzo:
- Sábados, domingos y festivos de 10:00 h. a 14:00 h.
- Del 14 de marzo al 23 de junio:
- Sábados de 10:00 h. a 14:00 hy de 15:15 h. a 18:30 h.
- Domingos de 10:00 h. a 14:00 h. y de 15:15 h. a 17:30 h.
- Del 24 de de junio al 11 de septiembre:
- Todos los días de 10:00 h. a 14:00 h. y de 15:15 h. a 18:30 h.
- Del 12 de de septiembre al 31 de octubre:
-
Sábados de 10:00 h. a 14:00 h. y de 15:15 h. a 18:30 h.
-
Domingos de 10:00 ha 14:00 h. y de 15:15 h. a 17:30 h.
-
- Del 1 de noviembre al 31 de diciembre:
- Sábados, domingos y festivos de 10:00 h. a 14:00 h.
- Periodos Festivos: Consultar en la web.
[/toggle]
[alert type=notice]
Esta experiencia fue posible gracias a la Diputación de Barcelona y la red social de viajeros Minube.
[/alert]
